Lima, Perú.
Una nueva medida comercial impulsada por el expresidente Donald Trump ha causado asombro en la comunidad internacional: entre los más de 180 países y territorios afectados por sus aranceles, se encuentran las remotas islas Heard y McDonald, administradas por Australia… y habitadas únicamente por pingüinos y focas.
En un anuncio realizado el miércoles, Trump explicó que la imposición del arancel del 10% forma parte de una estrategia de represalia contra lo que considera “prácticas comerciales injustas”. Aunque países como Rusia quedaron fuera de la lista, estas islas deshabitadas no corrieron con la misma suerte.
Sin población humana, sin actividad económica y sin exportaciones relevantes, estas islas se suman a la lista de decisiones insólitas del expresidente. Mientras tanto, sus únicos residentes —los pingüinos y las focas— seguirán con sus rutinas, ajenos al escenario geopolítico que los ha convertido, inesperadamente, en protagonistas de la economía global.
